Creo que el principal principio que debe seguir cualquier gobernante es el de respetar y hacer cumplir La Ley, con mayúsculas, y no su ley.
Bueno, pues eso parece que no se lo debieron inculcar a la señora Esperanza Aguirre, y ahora lo ha puesto de manifiesto al permitir en la Comunidad de Madrid que los padres de alumnos puedan objetar a la asignatura de Educación a la Ciudadanía. Ya me he manifestado en otros hilos de discusión mi total apoyo a esa ley, y creo sinceramente que la Iglesia y toda su cadena de lacayos (Partido Popular, Foro de la familia, etc) la denostan porque significa permitir a los profesores enseñar a los niños que los homosexuales y las familias monoparentales es algo normal y no pecaminoso, conceptos supuestamente "contrarios a la ley de Dios".
Parece que "la Espe" se ampara en una sentencia de esta semana en la cual el Tribunal de Andalucía ha dado la razón a un padre "objetor". Pero es que resulta que también existen otras sentencias en sentido contrario, aunque no se quiera dar cuenta producto de la ceguera electoral. ¿Qué parece lógico que debería hacerse? Pues que el Tribunal Supremo o el Constitucional se pronuncien de forma oficial, y hasta entonces pues todos a esperar. Creo que es lo coherente. Lo que no se puede hacer es acogerte a la sentencia que más te gusta o conviene y transformarla en ley inmutable en tu Comunidad. Claro que siendo del PP pues todo es relativo.
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